Cómo resolver conflictos de pareja
En nuestro último programa de la temporada hablamos con la sexóloga Almudena M. Ferrer sobre la forma en la que podemos afrontar los conflictos de pareja. Resolver conflictos de pareja puede ser un desafío, y en esta ocasión nos apoyamos en el trabajo de Esther Perel, una reconocida terapeuta de parejas, a través de enfoques prácticos y profundos que pueden ayudar a mejorar la dinámica de la relación y a superar los conflictos de manera constructiva.
Uno de los puntos clave de Perel es cambiar la perspectiva del conflicto. Ella sugiere que las parejas dejen de ver el problema como "yo contra ti" y comiencen a verlo como "nosotros contra el problema". Esta simple pero poderosa perspectiva ayuda a despersonalizar el conflicto y permite que ambos miembros de la pareja trabajen juntos como un equipo para resolverlo.
La comunicación efectiva es otro pilar fundamental en la filosofía de Perel. Ella enfatiza la importancia de hablar abierta y honestamente sobre los sentimientos y necesidades sin culpar al otro.
La escucha activa también es crucial. Debemos realmente escuchar y tratar de entender la perspectiva y los sentimientos del otro. Esto no solo ayuda a resolver el conflicto actual, sino que también fortalece la conexión emocional.
Reconocer los patrones recurrentes, mostrar aprecio y validar los sentimientos del otro, incluso en medio de un conflicto. Esto no significa que uno tenga que estar de acuerdo con todo, sino que es importante reconocer y respetar la experiencia del otro, lo cual puede reducir la hostilidad y abrir un espacio para la empatía.
Después de un conflicto, la reparación y la reconexión son esenciales. La importancia de las disculpas sinceras y los gestos de reconciliación, que pueden ayudar a sanar las heridas y fortalecer la relación a largo plazo.
Finalmente, si los conflictos son demasiado frecuentes o intensos, Perel recomienda buscar la ayuda de un terapeuta de parejas. Un profesional puede proporcionar estrategias adicionales y mediar en las discusiones difíciles, ofreciendo una perspectiva neutral y herramientas específicas para mejorar la relación.
Siguiendo estos principios, las parejas pueden aprender a manejar sus conflictos de manera más efectiva, fortaleciendo su conexión emocional y construyendo una relación más sólida y satisfactoria.